Errores Comunes en el Blackjack
Este artículo tratará de algunos de los errores comunes que los jugadores novatos y menos experimentados tienden a cometer. Algunos de ellos están ligados a la desviación del sistema de la administración predeterminada del dinero, en tanto otros, se deben, simplemente, a la falta de disciplina.
Elevar las Apuestas
Como ya lo dejamos claro en nuestra guía, la apuesta de progresión no puede servir de ayuda en la estrategia básica del blackjack, ya que las posibilidades se inclinan en contra del jugador. Así entonces, una vez que el jugador ha trazado un plan de administración del dinero, algo que ya explicamos en extenso en el artículo correspondiente, el jugador debe ceñirse a él.
Esto excluye la apuesta de progresión o cualquier otra forma de aumentar las apuestas en decisiones apresuradas.
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Muchos jugadores suelen abandonar su plan de juego y aumentar las apuestas después de una serie de manos ganadoras. Sin embargo, es importante recordar que aunque la variante, a veces, puede estar a favor del jugador, mientras se juegue por un tiempo más prolongado, más parejo será el juego. Esto quiere decir que la racha ganadora, a la larga, terminará y mientras más se apueste, más rápido el jugador perderá el dinero recién ganado.
El personal del casino y otros jugadores pueden aconsejarle al jugador que incremente sus apuestas mientras se está teniendo una racha ganadora. Los jugadores harán eso por curiosidad y diversión, después de todo no es su dinero el de la apuesta; en tanto, todo lo que los casinos desean es recuperar su dinero y avanzar tras del dinero del jugador.
Los crupieres presionarán a los jugadores para que eleven sus apuestas, para ello les dicen que es el dinero de la casa el que está en riesgo de pérdida., pero eso es sólo un truco barato para tentarlos ese dinero es de los jugadores y son ellos quienes han pagado por el riesgo para ganarlo.
Tener presente que aunque, a primera vista, pueda percibirse que perder algo de las ganancias sea un riesgo aceptable (las personas suelen pensar que estar, al menos, en un punto de equilibrio durante la noche es un consuelo), perder el total de las ganancias puede ser muy desalentador y frustrante, y puede conducir a decisiones insensatas que podrían provocar una pérdida mucho mayor.
Tratar de Compensar las Pérdidas
La situación opuesta también puede suceder. Muchos jugadores dan paso a emociones negativas después de perder una serie de manos e intentan recuperar las pérdidas aumentando sus apuestas. Esto es parecido al sistema de apuestas Martingala, donde un apostador dobla sus apuestas por cada apuesta perdida, y así una ganancia futura compense toda la serie de apuestas perdidas.
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Los jugadores pueden desalentarse cuando caen en una racha perdedora e irse de la mesa o, lo que es peor, pueden elevar sus apuestas para recuperar su dinero. Esto es, quizás, lo peor que se puede hacer, ya que, probablemente, acelerará las pérdidas y, al final, llevará a la ruina. Sesiones de pérdidas, todas las vueltas empatadas son algo bastante normal dentro de la desviación estándar, y deben ser asimiladas por los jugadores de una manera adecuada.
El jugador puede dedicarse a mejorar la situación del momento, sin tomar riesgos adicionales, manteniéndose tranquilo y ajustándose a su plan de juego trazado. No apostar más del capital, mantenerse tranquilo y no jugar por un tiempo más prolongado del que se había planificado en un inicio.
Estar bien Descansado
Jugar por un tiempo más prolongado del que se tenía pensado y cansarse puede dificultar su desempeño. Después de todo, el blackjack es un juego de destreza y pensamiento rápido, no es lanzar una moneda a la suerte. La falta de concentración, como resultado de la fatiga, puede ocasionar que se jueguen de forma incorrecta algunas manos obvias que, de otra forma, habrían ganado con facilidad.
Apostar más de lo Debido por Premios
Otro error común es extralimitar el capital por los premios. No olvidar que los elementos complementarios son usados por los casinos para atraer a los jugadores y mantenerlos en la mesa por más tiempo. Por definición, los premios tienen un costo por lo general, son proporcionales a las pérdidas que el jugador espera. Como un jugador que aplica la estrategia básica en forma adecuada, en una mesa agradable para el jugador, éste jugará en una desventaja de alrededor del 0, 5% contra la casa.
De tal modo, con el objeto de estar cercano o un poco más adelante con respecto a los regalos que se incluyen, el jugador necesita mantener las pérdidas en el mínimo. Y, ya que, apostar más de lo debido sin importar la razón, puede llevar, potencialmente, a la ruina, se debe evitar. El jugador tiene que graduar las apuestas a las que puede acceder con su capital, y comenzando desde ahí a ver a qué premios puede acceder.
Lo mismo cuenta para las “sobreapuestas” con el fin de impresionar a alguien. A menudo, las personas tienden a exagerar cuando están de buen humor y rodeados de amigos. También, se puede pensar que la hermosa joven, a la que se ha estado mirando toda la noche, podría sentirse atraída por esa persona que hace grandes apuestas. Pues bien, que el jugador pierda su dinero no la impresionará y su capital, tampoco, se sentirá mejor.
Dar Propina o no dar Propina, y Cuánto
Aunque es una costumbre, dar propina no es una obligación. Si el jugador decide darle una propina al crupier, ésta debe ser de acuerdo al capital y al desempeño esperado.
Los crupieres hacen la diferencia cuando se trata del clima en la mesa, pero también en la rapidez del juego. Y así, si un crupier hace bien su trabajo y mejora la experiencia del jugador en el casino, el jugador puede demostrar su gratitud con una propina.
Sin embargo, se debe hacer de una manera controlada y estrictamente proporcional. Los jugadores que tienen éxito en el blackjack, por lo general, ajustan sus propinas de acuerdo a un porcentaje de las ganancias que esperan obtener (1-2%). De manera que, como jugador con estrategia básica, las potenciales ganancias serán bastante pequeñas, es así que el jugador puede acomodar su propina a una cantidad fija, por ejemplo por hora, teniendo en cuenta las apuestas promedio. A modo de ilustración, si el jugador hace apuestas de $25, el jugador puede dar un toque (propina) de un dólar cada una hora o algo así. El jugador, también, puede considerar dejar una propina sólo después de una sesión de juego ganadora.
También se puede optar por no dar ninguna propina, pero un pequeño gesto puede dar grandes frutos. Ser conocido como alguien que da propinas puede ayudar a aumentar los regalos a recibir.
También se puede dar propinas a las camareras que sirven a los jugadores, y aunque ellas no tienen ninguna relación con el juego, dejar una pequeña propina puede, incluso ser bueno para mejorar su reputación ante los ojos de los supervisores de mesas y anfitriones. Sin embargo, esas retribuciones también deberían ser limitadas, ya que se acumulan hasta una cantidad bastante importante cuando se pasa del límite.
Tragos Gratis
Y ya que estamos hablando del tema, el jugador debería, sin dudarlo, estar atento a la cantidad de tragos que tiene. Los tragos gratis son comunes en los casinos y muchos jugadores, de verdad, los piden y los disfrutan como un producto adicional para jugar. Asegurarse de establecer límites concretos, si se quiere beber el cóctel ocasional o whisky cuando se juega. El alcohol puede nublar el juicio e incluso, si el jugador no se siente “entonado”, el razonamiento y la rapidez del pensamiento se pueden ver alterados y conducir a decisiones equivocadas.