En Australia, la semana pasada supimos que un jugador con una discapacidad significativa que necesitaba ayuda para apostar y hacer girar los carretes recibiría casi $320.000 en pagos atrasados, incluidos los intereses, de un bote ganado en 2019 con la ayuda de un jugador autoexcluido.
En los EE.UU., algunos jugadores en Pensilvania que anteriormente se autoexcluían de los juegos de azar en línea también encuentran cortado el acceso a los casinos basados en tierra en el estado.
Muchos sitios en línea seguros ofrecen una gran cantidad de herramientas de juego responsable activadas por el usuario, desde tiempos de espera y períodos de reflexión, hasta límites de depósito y límites de pérdida, hasta la autoexclusión total.
La decisión de apostar o utilizar las herramientas de juego responsable más sólidas nunca debe tomarse a la ligera.
En el primer caso, un jugador debe estar listo, dispuesto y ser capaz de perder su apuesta sin contar con un rendimiento financiero – es un negocio riesgoso y, en la mayoría de los casos, resulta en una pérdida.
En el segundo caso, las herramientas de autoayuda más drásticas, como la autoexclusión, pueden tener consecuencias desconocidas, incluidas pérdidas, incluso si el jugador gana.
Con más de 10.000 marcas de casinos en línea y quizás miles de operadores, no siempre es evidente si un sitio de juegos en Internet tiene sitios hermanos – puede ser aún menos evidente que la exclusión de juegos de azar en un sitio activará una prohibición en todas las propiedades del operador.
Para determinar eso, un jugador debe estar dispuesto a arremangarse y profundizar en los Términos y condiciones del casino o encontrar la Política de juego responsable del sitio.
Dado que no existe una base de datos global central de esta información, la única otra opción es leer reseñas escritas por expertos en juegos de apuestas confiables.
Esto se vuelve aún más importante teniendo en cuenta el hecho de que la mayoría de los operadores en línea no hacen su debida diligencia con los jugadores hasta que llega el momento de pagar.
Un jugador autoexcluido podría depositar varias veces sin revisión. Aún así, cuando llega el momento de verificar su identidad para recibir el pago, sus datos personales podrían desencadenar una investigación o incluso el cierre inmediato de la cuenta.
Una Apuesta Realizada Sigue Siendo una Apuesta Pagada en Australia
En 2019, en Star Casino en Sydney, un cliente con una discapacidad significativa ganó un bote de $285.000 en una máquina tragamonedas. Un amigo lo ayudó a hacer sus apuestas, pero la carta, las decisiones y el riesgo del jugador eran todos suyos. El casino decidió no pagar el bote porque su amigo se había autoexcluido del casino en 2016 y no se suponía que estuviera en la propiedad, y mucho menos manejando una máquina.
Un juez falló a favor del jugador, otorgándole la ganancia más alrededor de $35.000 en intereses sobre el dinero, así como los costos legales del jugador.
El ganador no tenía motivos para pensar que su amigo estaba baneado y el amigo no lo mencionó porque había disfrutado de acceso ilimitado durante al menos 6 meses.
En su fallo, el juez dijo: ‘La totalidad de la apuesta económica apostada durante la operación de las máquinas de juego por [el amigo], mientras se insertaba la tarjeta [del ganador] y él miraba y daba instrucciones [al amigo], era el dinero del [jugador]
Concluyó: “En consecuencia, la falta de pago [del casino] de las ganancias… fue mal interpretada e incumplió el contrato de apuesta entre el demandante y el demandado.”
Una apuesta realizada es una apuesta pagada en Australia.
Pensilvania Niega las Solicitudes de los Jugadores para Ser Eliminados de la Lista de Exclusión
En los EE. UU., el estado de Pensilvania ha estado regulando los casinos desde 2006. La lista de jugadores excluidos del estado tiene más de 10.000 nombres. El juego en línea se liberalizó allí en 2017 y se lanzó en 2019. Se desarrollaron nuevas listas de autoexclusión para casinos y, eventualmente, apuestas deportivas. La lista de exclusión de iGaming de Pensilvania tiene casi 2.000 nombres, según una publicación en PennBets.
El juego en línea puede ser mucho más rápido que el juego físico, por lo que los riesgos y las recompensas también se pueden extrapolar. En el lado negativo, los jugadores pueden perder dinero más rápido y pueden perder más si son impulsivos y no tienen restricciones.
La Junta de Control de Juegos de Pensilvania (PGCB, por sus siglas en inglés) no prohíbe automáticamente a los jugadores de los casinos físicos que se han autoexcluido en línea. Sin embargo, muchos de los 16 casinos físicos del estado no diferencian y prohíben a los jugadores en todos los ámbitos.
En lo que va del año, siete jugadores han solicitado a la PGCB que se levanten sus exclusiones en línea para poder jugar en casinos físicos donde el ritmo es más lento y no han solicitado la exclusión.
Cinco fueron denegadas a principios de este año y dos más en agosto. Si bien estos siete jugadores llevaron el proceso hasta su conclusión final, muchos otros simplemente se dieron por vencidos sin seguir todos los pasos. Cada uno de los jugadores se prohibió jugar en línea durante un año, cinco años o de por vida.
Por extraño que parezca, siempre que parezcas lo suficientemente mayor para apostar, los administradores de los casinos no solicitan ver la identificación de los jugadores que ingresan al piso del casino para apostar, al igual que los casinos en línea no verifican tu identificación cuando depositas. Desafortunadamente, cualquier ganancia significativa podría requerir que los jugadores muestren una identificación y sus ganancias serían negadas, tal como lo harían los casinos en línea si se autoexcluyera de un sitio hermano.
Después de una mala sesión, muchos jugadores en línea cierran sus cuentas de casino y se registran en otro. En el proceso, pueden decir algo que los coloque en una lista de exclusión cuando esa nunca fue su intención. Para evitar eso, los jugadores pueden simplemente poner a cero el saldo de la cuenta y luego ignorar el sitio en el futuro.
Si alguna vez experimenta dificultades o cree que podría experimentarlas, los jugadores deben valerse de todas las herramientas de juego responsable a su disposición, pero el último acto de autoexclusión debe considerarse tan cuidadosamente como la decisión de apostar en primer lugar, basándose en el conocimiento, no en la emoción.
Fuente: Sydney’s Star casino ordered to pay $285,000 jackpot to disabled man after withholding 2019 win, The Guardian, 22 de agosto de 2022
