Un juez de la Corte Superior de New Jersey declarará en julio la constitucionalidad del programa PILOT que exime a los siete casinos operativos de Atlantic City de pagar impuestos sobre la propiedad a cambio de un pago colectivo anual de $120 millones.
La llamada ley PILOT fue introducida para que desde sus casinos se generen unos ingresos muy necesarios para la ciudad. Por otra parte, el programa de reducción de impuestos fue diseñado de una manera que evitara que la maltrecha industria de los casinos de Atlantic City sufriera pérdidas adicionales.
Liberty and Prosperity, un grupo de defensa que lleva como nombre de marca el lema de Nueva Jersey, ha impugnado la ley PILOT, argumentando que ha violado la Constitución del estado. El grupo ha señalado que, bajo la Constitución de New Jersey, la exención de impuestos sólo se puede presentar a través de leyes que se aplican en todo el estado. Los opositores al programa de exención de impuestos de Atlantic City también han señalado que este permitiría que los siete negocios de casino experimentaran un descenso de impuestos que afectaría de forma negativa a otros negocios y contribuyentes ubicados en el condado.
Hablando con los medios de comunicación locales, Seth Grossman, Director Ejecutivo de Liberty and Prosperity y un abogado, dijo que la Constitución de Nueva Jersey permite ciertas exenciones fiscales para estimular la inversión y el desarrollo. Sin embargo, el Sr. Grossman dice que el programa PILOT amplía tales estímulos hasta un grado absurdo.
Según el abogado, las poderosas corporaciones detrás de los siete casinos operativos de Atlantic City y sus lujosas propiedades no deberían recibir unos privilegios tributarios tan importantes. El grupo Liberty and Prosperity tratará de convencer a la corte de que los lugares de juego permanecerán intactos en caso de futuros aumentos de impuestos debido al programa PILOT, mientras que los propietarios de Atlantic City y negocios más pequeños tendrán que cargar una carga más pesada.
La ley para la caída de impuestos fue el centro de las crecientes preocupaciones sobre el futuro de Atlantic City y de su industria de casino después de que cuatro de sus casinos cerraran sus puertas en 2014. La gran recesión y la competencia cada vez mayor entre los casinos de los estados vecinos afectaron la rentabilidad del una vez popular centro de juego.
La ciudad ha estado mostrando ciertos signos de recuperación durante el año pasado o así. Sin embargo, le será difícil recuperar su antigua gloria, sobre todo teniendo en cuenta el hecho de que los estados circundantes están expandiendo sus propias industrias de juego de forma rápida y a gran escala.
En una nota más positiva, a pesar del cierre de cuatro casinos en 2014 y del Trump Taj Mahal en octubre de 2016, parece que Atlantic City no ha perdido su atractivo para los inversores. Hard Rock International compró recientemente el casino Trump Taj Mahal y dio a conocer un plan de desarrollo de $500 millones que se espera que se complete con la apertura de Hard Rock Hotel & Casino Atlantic City en el verano de 2018.
