Ayer, en el Parlamento de Cataluña se ha dado el visto bueno a la moción del Centro Recreativo Turístico, conocido con su antiguo nombre Barcelona World. Su voto en favor al proyecto dieron todos los partidos en el parlamento, JxSí, C’s, PSC y PP. Por otro lado, la CUP y CSQP fueron la excepción. De esta manera, con la mayoría de los votos el texto de moción recibió en total 110 votos para la aprobación del proyecto, y 20 en contra.
Había una abstención de un diputado d JxSí, Gerard Gómez del Moral. En su comentario sobre el asunto, el portavoz de JERC dijo que su posición de oposición al proyecto no se ha cambiado.
El texto de moción demuestra la participación beneficiosa del Centro Recreativo Turístico que estará ubicado en Salou y Vila-seca y debería activar su instalación lo más rápido posible, pero después de que sea aprobado del Plan Director Urbanístico.
El Parlamento Catalán ha aprobado, con la mayoría de los votos, urgir al gobierno de Cataluña a no usar el proyecto como herramienta de negociación relacionada con la cuestión de confianza que según lo anunciado por el presidente Carles Puigdemont tendrá lugar en septiembre.
De este último dicho, el nuevo proyecto de Barcelona World no se utilizará en la negociación, todo lo contrario de lo que sucedió en enero cuando el proyecto de Barcelona World fue uno de los puntos de cuales surgió una discusión. Una de las razones por la cual se empezó a cambiar el proyecto.
El diputado de PP por Tarragona, Alejandro Fernández presentó la moción que ha encomendado la nueva mayoría favorable al proyecto de BCN World. Fernández extraño la posición de CUP Y CSQEP, que votaron en contra, diciendo que estuvo asombrado de ver que estaban a favor de la legislación de las drogas y la prostitución, pero están en contra del juego. Como ya es conocido, del CUP no apoyan el complejo de casinos. Por eso estiman que el gobierno actúa en colaboración con La Caixa para que venda los terrenos.
Por su parte, Jordi Terrades mencionó que ya no se trataba del mismo proyecto, con las condiciones iniciales como se les habían vendido del Gobierno y del Grupo Veramonte, porque sin dudas la superficie total proyectada, tanto para las salas de juego como las hoteleras han disminuido considerablemente.